jueves, 26 de marzo de 2015

EL HOMBRE DE PALO

El hombre de palo fue un artificio construido por Giovanni Torriani (*Cremona, Milanesado, 1500 - †Toledo, España, 1585), más conocido como Juanelo Turriano, inventor, arquitecto y Relojero Real de Carlos I. Existen dudas sobre su naturaleza y función, pero la leyenda más extendida en la ciudad de Toledo afirma que consistía en un aparato antropomórgico de madera, construido con el fin de recolectar limosnas, y con capacidad para mover piernas y brazos.
Algunas versiones poco verosímiles de la leyenda dicen que dicho artefacto era capaz de andar buscando la caridad de los viandantes, y que incluso era capaz de inclinarse en una reverencia cuando recibía alguna moneda. No hay muchos documentos históricos acerca de la naturaleza del autómata, ya que fue quemado cuando aún Turriano estaba con vida, pero ha quedado constancia del punto donde se localizaba: la antigua calle de las Asaderías de Toledo, actualmente denominada "Calle del Hombre de Palo".
Existe una curiosa teoría, según la cual Doménico Teotocopulos, El Greco, en su obra "El entierro del Conde de Orgaz" expone quiénes ocultaron el armazón del autómata. Para ello, se basa en las escenas que adornan las vestiduras de las apariciones celestiales, en el misterioso monje de hábito gris, y en el paje que, en primer término, señala claramente el símbolo rosacruz en una de las túnicas.

Redactora: Carmen Pérez Gilabert.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMENTARIOS